domingo, 11 de mayo de 2014

Ruta 5: Berganzo- Cascada Inglares -Berganzo

 Después de algún tiempo sin publicar nada nuevo en el blog (algún post sí que he actualizado, pero pocos) vuelvo con el tema de las rutas, que aunque nadie deja ningún comentario, según las estadísticas es lo más visitado de esta web.
He instalado en el teléfono móvil una aplicación que genera una ruta a medida que vas andando y luego se puede exportar directamente a wikiloc. Parece una herramienta interesante y trataré de usarla todo lo que pueda. Al final las rutas se quedan guardadas de forma pública en wikiloc y todo el mundo puede descargarse las rutas para que le guíen con un GPS. Os dejo el enlace a esta ruta en la web (enlace).
Bueno al grano. He llamado a esta ruta "Ruta del agua Inglares" y la verdad es que la mayoría del camino se hace a menos de 5 metros de un cauce de agua, primero del río Inglares y en la segunda parte del canal de la central hidroeléctrica de Berganzo. Salimos por el camino de Espea (junto al puente de arriba) y seguimos el camino aproximadamente 1Km. En ese punto (foto) nos desviamos por la senda de la izquierda bajando hacia la Tejera.
Seguimos la senda que nos acerca poco a poco al río. En estas fechas hay bastante agua y algunas zonas del camino están realmente encharcadas... Se han puesto algunos troncos, pero si vais con un buen calzado tanto mejor.
Ya junto a río seguimos una senda sombría rodeada de hayas realmente agradable, subiendo de forma moderada y cómoda . 
 Aproximadamente a 1,5Km desde el primer desvío llegamos a la carretera que baja desde Peñacerrada. Aprovechando el puente cruzamos al otro lado del río. Un camino hay al otro lado de la carretera. Entramos por él y a unos 150m encontramos un desvío a la izquierda que nos lleva a una finca. Bordeandola encontramos una senda a la izquierda que se divide en tres un poco más adelante. La senda de frente llega a una mirador con una bajada excesivamente pronunciada a la cascada. La de la derecha va a la cascada, pero de forma más cómoda. La de la derecha será la que tomaremos un poco más tarde. 
La cascada es para disfrutar. Un buen sitio para sentarse y relajarse con el ruido del agua cayendo con fuerza a la poza.
 Salimos de este pedazo de paraíso y cogemos la senda que habíamos dejado atrás. En una subida corta pero pronunciada llegamos al cauce del canal de la central hidroeléctrica de Berganzo. Este canal fué contruido a finales del siglo XIX y seguramente en su momento fué un gran logro de ingeniería y un gran avance para surtir de energía eléctrica al sur de Vitoria.
 Seguiremos el canal en dirección a Berganzo (izquierda) por un camino sencillo y llevadero. A parte de las vistas que vamos a ir teniendo a medida que ganamos altura fijaros en los animales que encontraremos en el camino. Una pareja de patos me ha asustado un par de veces y unas truchas enormes corren a esconderse a nuestro paso (ojo, no se puede pescar...).

 En unos tres cuartos de hora llegamos al sobrante del canal que se abre o se cierra en función del agua que se necesita en la central. Pocos metros más adelante encontramos la senda para bajar a Berganzo. No os recomiendo llegar al final del canal ya que desde allí la bajada no es sencilla. Aún así si llegais hasta el final no salteis la valla que cierra el depósito. Es un lugar peligroso con una fuerte corriente y caerse en ese depósito no es en absoluto recomendable. Así que un poco de cabeza y si habeis llegado hasta el depósito lo mejor es volver sobre nuestros pasos hasta encontrar la senda de la que hablamos.

Por la senda vamos llegando poco a poco al pueblo. Y en total unas dos horas, tranquilas, de paseo agradable, sencillo para ir con niños. Espero que disfruteis de este paseo.

No quiero dejar pasar este post para recordar una norma fundamental del senderismo, del buen montañero y de las personas en general. Por muchas sendas de las que disfrutamos en nuestros paseos han pasado personas como nosotros desde hace decadas, siglos e incluso milenios. Si nos las encontramos límpias y "virgenes" es porque nuestros antecesores han cuidado que su paso pase desapercibido. Haced lo mismo y así cada uno de nosotros disfrutaremos de lugares únicos y límpios en los que disfrutar.

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